Cocina Estilo Nórdico

Las cocinas de estilo nórdico: una tendencia que no pasa de moda

La decoración y los muebles de diseño escandinavo nos cautivaron hace años por su calidez, sencillez y practicidad y, a día de hoy, es una tendencia que sigue pisando fuerte. Su espíritu minimalista y los materiales que la caracterizan, como la madera natural, las texturas y los tonos blancos y grises transmiten paz y serenidad, algo a lo que la gran mayoría aspira a tener en su hogar.
Las cocinas se prestan especialmente a este estilo decorativo, puesto que son espacios donde la funcionalidad y el orden deben primar. 

Ventajas de una cocina escandinava

- Diseño sencillo: un gran punto a favor del estilo escandinavo es que basta con seguir unas pautas básicas para lograr un espacio bonito, acogedor y luminoso. No necesitas ser diseñador de interiores ni tener un sexto sentido en decoración para incorporarlo en tu hogar. Además, se trata de un estilo de diseño atemporal que no pasa de moda ni cansa la vista al predominar los colores neutros y elementos naturales.
- Todo ordenado: el carácter minimalista de este estilo fomenta el orden y la limpieza, de modo que además de tener una cocina bonita, disfrutarás de la calma que transmite el orden visual y podrás dedicar más tiempo a preparar deliciosos platos y hacer lo que te gusta. 
- Versátiles: las cocinas nórdicas se adoptan por igual en hogares grandes y pequeños. Su carácter flexible y funcional permite añadir módulos, una isla o sistemas de almacenaje en función de las necesidades de cada uno. En esta tendencia es habitual que la cocina esté conectada con el comedor o abierta al salón.

Claves para diseñar una cocina de estilo nórdico

Al diseñar una cocina de estilo escandinavo prestaremos especial atención a los materiales y acabados. Para los armarios, las puertas de líneas limpias en madera natural o en colores como el blanco, beige o gris claro aportarán luminosidad a la cocina. La madera también suele estar presente en suelos o encimeras, e incluso en estantes abiertos donde dispondremos platos, tazas y algunos elementos decorativos con los que dar un toque personal a la estancia. Para aportar mayor calidez, unas cortinas de lino, una bonita alfombra, unos azulejos artesanales o unos cojines en las sillas de la cocina.
La practicidad es otro elemento clave de las cocinas nórdicas: imagina sistemas de almacenaje integrados en el mobiliario, cajones y alacenas a medida y soluciones que hacen uso de cada rincón y te ayudan a tenerlo todo perfectamente organizado y mantener la encimera despejada.
A nivel visual, la estética minimalista es clave, por lo que evitaremos sobrecargar la cocina con elementos decorativos innecesarios y procuraremos tener un espacio de almacenaje dedicado a los pequeños electrodomésticos para mantenerlos fuera de la vista cuando no están en uso.
La luz natural cobra protagonismo en una cocina de diseño nórdico al reflejarse en las superficies blancas y la madera. Y en lo que respecta a la iluminación artificial, procuraremos colocar focos de luz cálida por zonas de trabajo para lograr ese ambiente acogedor tan característico.
Las plantas son buenas amigas de este estilo y darán vida y calidez a tu cocina: prueba a colgarlas del techo o colocar unas hierbas aromáticas en el alféizar de la ventana para que no te roben espacio.

El hygge en tu cocina

La palabra hygge se emplea a menudo para explicar los pilares del estilo de decoración escandinava. Procede del noruego y se traduce como “comodidad” o “bienestar”. Se trata de crear espacios acogedores que inviten a cuidarse, a vivir en el presente y a disfrutar en el hogar. 
Si deseas disfrutar de esta sensación en tu cocina, esta tendencia es para ti. Contacta con nuestros profesionales para recibir asesoramiento y empezar a diseñar la tuya.